El 10 de septiembre de 2015 fue arrestado, en la cuidad de Salinas en Ecuador, Gerald Oropeza, también conocido como ‘Tony Montana’, apodo que lleva en honor al personaje de Al Pacino en la pélicula Scarface.

Gerald es un notorio traficante de drogas peruano, que tenía pedido de captura desde el 20 de abril de 2015, luego de que sobrevivió un ataque auto-bomba a raiz de una pelea con Gerson Galvez, otro sospechoso en el tráfico de drogas.

El día de su arresto, Oropeza, fue visto caminando por la costa de Salinas, y fue identificado por un tatuaje con su nombre que tiene en su talón derecho. Su captura se dió por medio de una operación conjunta entre Perú y Ecuador, en un intento por terminar con el narcotráfico internacional.

Oropeza es acusado de transportar gran cantidades de cocaína desde el puerto El Callo, en la costa peruana, hacia Europa, Centro América y Méjico. Según reportes de la U.E y E.E.U.U, ha colaborado con la organización criminal italiana “Ndrangheta” y ha ayudado a transformar Colombia en la capital mundial de la producción de cocaína.

La captura de Oropeza es un paso importante en la lucha contra el tráfico internacional de dogras. Su arresto muestra la importancia en el control de los puertos, especialmente El Callo, que juega un papel clave en el narcotráfico internacional en Perú.

Las fuerzas peruanas necesitan prestar atención tanto en los puertos, como en las zonas de producción de cocaína en las montañas controladas por los rebeldes.

Por muchos años, Perú se ha concentrado en vigilar la zona aérea de tráfico, el método más usado en la exportación de droga en el país. Las fuerzas armadas han progresado, destruyendo pistas de aterrizaje remotas, especialmente en la zona de VRAEM, lugar que produce vasta cantidad de cocaína peruana.

En agosto de 2015, el congreso peruano aprobó, con voto unánime, una ley controversial que permite que las fuerzas militares disparen y bajen aviones sospechosos de tráfico de droga.

Lamentablemente, al mismo tiempo que se avanza en la pelea contra el tráfico aéreo de drogas, se neglecta el control en los puertos.

Redes criminales, incluyendo la de Oropeza, han estado involucradas en contínuas peleas por el control del puerto El Callo , enfatizando el papel clave de los puertos en el juego del narcotráfico internacional en Perú.

Oropeza fue deportado de Ecuador a Perú y será transladado a una cárcel de máxima seguridad en Lima, donde permanecerá hasta la resolución de su juicio.